La visa E2 no ofrece un camino directo a la residencia permanente en Estados Unidos, pero puede renovarse indefinidamente siempre que mantengas una inversión activa en un negocio que califique. Existen opciones para solicitar la residencia permanente mientras se disfruta de los beneficios de la visa E2, lo cual es posible gestionar mientras el inmigrante permanece en Estados Unidos.
Con una visa E2, el inversionista debe centrarse en la gestión de la empresa en la que ha invertido. Sin embargo, algunos abogados pueden diseñar estructuras corporativas que permiten al inversionista realizar otras actividades comerciales. Además, el cónyuge del titular de la visa E2 puede trabajar en cualquier lugar de los Estados Unidos, ya sea en su propia empresa, en una empresa ajena, por nómina, por honorarios profesionales o desarrollando otros proyectos.
Si, ambos cónyuges pueden combinar sus obligaciones laborales con cualquier tipo de estudios que deseen llevar a cabo.
Si el inversionista no es residente fiscal en Estados Unidos, solo pagará impuestos sobre la renta generada dentro del país. Sin embargo, si se convierte en residente fiscal, deberá declarar su renta mundial. La visa E2, al no requerir un tiempo mínimo de estadía en Estados Unidos, permite al inversionista evitar convertirse en residente fiscal y, por tanto, limitar su obligación tributaria a los ingresos obtenidos en Estados Unidos.
No es requerido estar presente en los Estados Unidos para gestionar una visa E2. El abogado migratorio se encarga de introducir el folio con los documentos requeridos y el inversionista solicita una cita en el consulado americano de su país, donde será otorgada la visa. Inclusive, el inversionista puede llevar todo el proceso de inversión desde su país. Globofran apoyará al inversionista en todas las gestiones necesarias en este aspecto, incluyendo la creación y formalización de la compañía y la apertura de la cuenta bancaria.
Cualquier inversión para una visa de inversionista debe estar sujeta a riesgo, como cualquier negocio que se desarrolle en cualquier parte del mundo. Si la inversión se garantiza, no funciona para optar por una visa E2.
Si, si el dinero proviene de un regalo, puede ser utilizado perfectamente para invertir en un proyecto para optar a una visa E2. Es muy importante tener claro y documentado el origen de fondos del dinero de regalo, el donante debe proveer la información de procedencia del dinero utilizado.
La visa E2 contempla solo a los cónyuges e hijos menores de 21 años. Si alguno de los padres viene como socio en la inversión y la inversión total supera los US$ 300 mil, ambas familias pueden solicitar la visa.
No, los hijos menores de 21 años no pueden trabajar. Pueden estudiar en cualquier institución educativa sea pública o privada.
La visa E2 no impone requisitos de estadía mínima en Estados Unidos. Mientras la inversión permanezca activa, el inversionista puede residir en su país de origen y viajar a Estados Unidos con la frecuencia que desee, permaneciendo el tiempo necesario para gestionar su negocio. Es crucial utilizar la visa E2 regularmente, ya que esto suele ser necesario para administrar la empresa en la que se ha invertido.
La inversión se puede hacer de forma personal, pero es muy recomendable crear una compañía, especialmente si se va a operar un negocio y contratar personal. Es muy importante que la compañía tenga una cuenta bancaria abierta en cualquier banco de los Estados Unidos.
Las inversiones inmobiliarias no llevan a visas E2, porque son inversiones pasivas, que no generan empleo. Ahora, con nuestra opción PlanB USA, el inversionista se convierte en un promotor de construcción de viviendas familiares, lo cual le permite poder aplicar para una visa E2, porque es un negocio que genera empleo y actividad comercial.
Las inversiones inmobiliarias tradicionales no califican para una visa E2, ya que son inversiones pasivas que no generan empleo. Sin embargo, con nuestra opción PlanB USA, el inversionista puede convertirse en promotor de construcción de viviendas familiares, lo que sí permite solicitar una visa E2, ya que se trata de un negocio que genera empleo y actividad comercial. En este modelo, el inversionista no entrega su dinero a terceros; en su lugar, administra directamente los fondos destinados a la inversión, cubriendo las necesidades del proyecto. Para aplicar a la visa E2, el inversionista debe depositar o transferir el monto de inversión a la cuenta bancaria de su propia empresa y, desde ahí, gestionar y ejecutar el proyecto.
Para optar por una visa E2, la inversión puede incluir una porción de financiamiento. Es fundamental demostrar el origen de los fondos del activo utilizado como garantía para obtener dicho financiamiento.
La visa E2 no ofrece un camino directo a la residencia permanente en Estados Unidos, pero puede renovarse indefinidamente siempre que mantengas una inversión activa en un negocio que califique. Existen opciones para solicitar la residencia permanente mientras se disfruta de los beneficios de la visa E2, lo cual es posible gestionar mientras el inmigrante permanece en Estados Unidos.
Con una visa E2, el inversionista debe centrarse en la gestión de la empresa en la que ha invertido. Sin embargo, algunos abogados pueden diseñar estructuras corporativas que permiten al inversionista realizar otras actividades comerciales. Además, el cónyuge del titular de la visa E2 puede trabajar en cualquier lugar de los Estados Unidos, ya sea en su propia empresa, en una empresa ajena, por nómina, por honorarios profesionales o desarrollando otros proyectos.
Si, ambos cónyuges pueden combinar sus obligaciones laborales con cualquier tipo de estudios que deseen llevar a cabo.
Si el inversionista no es residente fiscal en Estados Unidos, solo pagará impuestos sobre la renta generada dentro del país. Sin embargo, si se convierte en residente fiscal, deberá declarar su renta mundial. La visa E2, al no requerir un tiempo mínimo de estadía en Estados Unidos, permite al inversionista evitar convertirse en residente fiscal y, por tanto, limitar su obligación tributaria a los ingresos obtenidos en Estados Unidos.
No es requerido estar presente en los Estados Unidos para gestionar una visa E2. El abogado migratorio se encarga de introducir el folio con los documentos requeridos y el inversionista solicita una cita en el consulado americano de su país, donde será otorgada la visa. Inclusive, el inversionista puede llevar todo el proceso de inversión desde su país. Globofran apoyará al inversionista en todas las gestiones necesarias en este aspecto, incluyendo la creación y formalización de la compañía y la apertura de la cuenta bancaria.
Cualquier inversión para una visa de inversionista debe estar sujeta a riesgo, como cualquier negocio que se desarrolle en cualquier parte del mundo. Si la inversión se garantiza, no funciona para optar por una visa E2.
Si, si el dinero proviene de un regalo, puede ser utilizado perfectamente para invertir en un proyecto para optar a una visa E2. Es muy importante tener claro y documentado el origen de fondos del dinero de regalo, el donante debe proveer la información de procedencia del dinero utilizado.
La visa E2 contempla solo a los cónyuges e hijos menores de 21 años. Si alguno de los padres viene como socio en la inversión y la inversión total supera los US$ 300 mil, ambas familias pueden solicitar la visa.
No, los hijos menores de 21 años no pueden trabajar. Pueden estudiar en cualquier institución educativa sea pública o privada.
La visa E2 no impone requisitos de estadía mínima en Estados Unidos. Mientras la inversión permanezca activa, el inversionista puede residir en su país de origen y viajar a Estados Unidos con la frecuencia que desee, permaneciendo el tiempo necesario para gestionar su negocio. Es crucial utilizar la visa E2 regularmente, ya que esto suele ser necesario para administrar la empresa en la que se ha invertido.
La inversión se puede hacer de forma personal, pero es muy recomendable crear una compañía, especialmente si se va a operar un negocio y contratar personal. Es muy importante que la compañía tenga una cuenta bancaria abierta en cualquier banco de los Estados Unidos.
Las inversiones inmobiliarias no llevan a visas E2, porque son inversiones pasivas, que no generan empleo. Ahora, con nuestra opción PlanB USA, el inversionista se convierte en un promotor de construcción de viviendas familiares, lo cual le permite poder aplicar para una visa E2, porque es un negocio que genera empleo y actividad comercial.
Las inversiones inmobiliarias tradicionales no califican para una visa E2, ya que son inversiones pasivas que no generan empleo. Sin embargo, con nuestra opción PlanB USA, el inversionista puede convertirse en promotor de construcción de viviendas familiares, lo que sí permite solicitar una visa E2, ya que se trata de un negocio que genera empleo y actividad comercial. En este modelo, el inversionista no entrega su dinero a terceros; en su lugar, administra directamente los fondos destinados a la inversión, cubriendo las necesidades del proyecto. Para aplicar a la visa E2, el inversionista debe depositar o transferir el monto de inversión a la cuenta bancaria de su propia empresa y, desde ahí, gestionar y ejecutar el proyecto.
Para optar por una visa E2, la inversión puede incluir una porción de financiamiento. Es fundamental demostrar el origen de los fondos del activo utilizado como garantía para obtener dicho financiamiento.